¿Uribe, el saboteador de la paz en Colombia?

Opina - Política

2016-10-18

¿Uribe, el saboteador de la paz en Colombia?

Fue lo que afirmó el pasado viernes The New York Times, a través de su comité editorial. «Es hora que el expresidente, Álvaro Uribe Vélez, se comporte como un estadista y no como un saboteador».

Con esa afirmación de uno de los diarios más influyentes de Estados Unidos, Uribe ha logrado mostrarse como el político que puso el palo en la rueda a la paz. Es verdad que se trata de una paz a medias, como también es cierto que ha evitado la muerte de varios civiles, militares y guerrilleros, la gran mayoría, colombianos pertenecientes a los estratos sociales más bajos.

Ya ha transcurrido casi un mes desde que los colombianos manifestaron a través del voto y por un margen de diferencia estrecho, la desaprobación a la negociación pactada entre las Farc y el Gobierno que busca poner fin a un conflicto armado de más de medio siglo.

El triunfo del NO fue posible porque el expresidente Uribe le dijo a millones de colombianos, durante varios meses, que él también quiere la paz, que votar por el NO, no significaba volver a la guerra con las Farc y Colombia tendría la posibilidad de conseguir unos mejores acuerdos. Muchos le creyeron y siguen a la espera de esos mejores acuerdos.

Mientras los días pasan, miles de personas han marchado por todo el país pidiendo al gobierno no volver a la confrontación armada, y ruegan que no se levante el cese bilateral al fuego que ha evitado muchas muertes durante el último año de negociaciones con las Farc.

Es imposible desconocer que el cuestionado triunfo del NO significa per se el triunfo de Uribe. Si bien, parte de la «victoria» del NO se le atribuyó a sectores políticos, sociales y religiosos del país, temerosos de lo pactado en la Habana, también se debe decir que todos repetían «coincidentemente» las objeciones que el expresidente Uribe iba promulgando por todo el país: no a la impunidad, no a la elegibilidad política de las Farc y no al «Castrochavismo»; la supuesta inclusión en los acuerdos de paz del aborto y la «homosexualización de la sociedad» -ideología de género- fue un extraño discurso que el exprocurador, Alejandro Ordoñez, adoptó y que a la fecha no ha podido explicar con claridad cada vez que la prensa le pregunta por eso. (http://www.pulzo.com/nacion/entrevista-yolanda-ruiz-exprocurador-alejandro-ordonez/PP135289)

Dicho lo anterior, se puede mencionar que los argumentos que el expresidente Uribe promovió, para invitar a los escépticos a rechazar en las urnas los acuerdos de paz firmados en Cartagena el 27 de septiembre, calaron entre millones de personas que dijeron NO, y que esperan, se les cumpla con el modelo de paz prometido.

En la actualidad, el proceso de paz se encuentra en un»estado agonizante» que en caso de morir-deseo que no sea así- contaría minutos para empezar a registrar los nuevos muertos que engrosarían las penosas cifras, ya existentes, de este conflicto armado, y que colocarían en los libros de historia a Álvaro Uribe como el político que «ingeniosamente» saboteó la posibilidad de terminar la confrontación armada por la vía del diálogo, dando así crédito a la afirmación del diario estadounidense The New York Times: «Uribe, el hombre que bloquea la paz en Colombia»

Hasta el día de hoy, el ex mandatario se resiste a la creación y designación de un comité que vaya a La Habana a renegociar los acuerdos de paz para sugerir las modificaciones, que a su modo, considera apropiadas para garantizar una paz sin impunidad, como lo prometió a su electorado. (http://m.elheraldo.co/nacional/uribe-asegura-que-no-quieren-participar-en-dialogo-en-la-habana-y-no-buscan-una)

A decir verdad, el expresidente Uribe, ha presentado una serie de propuestas despegadas de la realidad, con visos de impunidad para los guerrilleros rasos -algo que ya está en el acuerdo- y que excluye a las verdaderas víctimas de conflicto armado, lo que  muy posiblemente terminará prolongando la agonía del proceso de paz.

Quien haya tenido la oportunidad de entender lo que el expresidente propone en los diez puntos presentados al gobierno de Juan Manuel Santos, puede ver que sólo en temas de justicia y tierra, columna vertebral del proceso de paz, sus iniciativas son más regresivas que propositivas: todas sus propuestas conducen a un cambio estructural del acuerdo, lo que llevaría más de un año, por lo que se puede sospechar que sus «intenciones de paz» están relacionadas con ganar más tiempo para ingeniarse la manera de regresa a la Casa de Nariño en cuerpo ajeno, y así,  lograr un acuerdo de paz similar al de Santa Fe de Ralito que garantice un sinnúmero de beneficios, principalmente en tierras y evasión de justicia para él y su séquito de bellacos.

La verdad es que ahora Uribe tiene la responsabilidad de demostrar que la paz que prometió en su campaña del NO es posible, y no quedar como el saboteador que mostró The New York Times ante al mundo.

Publicado el: 18 Oct de 2016

 

 

 

 

 

 

( 1 ) Comentario

  1. Las propuestas que propone Uribe solo benefician a él y sus lacayos que compraron tierras que quitaron los paramilitares a los campesinos. Que el centro democratico es el mayor promotor que frena la restitución de tierras. Y que se beneficia uribe que no se le castigue por los crimenes cometidos por él y socios.

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Diego Andrés Quintero
Estudiante de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad. Cooperativa de Colombia.