¿Y dónde estaban las mujeres el 20 de julio de 1810?

Año tras año se validan historias androcéntricas que sumergen en el fondo del olvido sujetos históricamente invisibilizados, las mujeres.

Opina - Cultura

2018-07-18

¿Y dónde estaban las mujeres el 20 de julio de 1810?

En la historiografía latinoamericana en general y, colombiana en particular, el papel de la mujer en las gestas de independencia ha pasado desapercibido, ignorado, a un segundo plano. Siempre se indaga y exalta el protagonismo de los grandes prohombres y caudillos miembros del panteón de los mártires de la patria, mismos que se recuerdan y veneran año tras año, en cierta forma se validan historias androcéntricas que sumergen en el fondo del olvido sujetos históricamente invisibilizados, las mujeres, que como veremos, sí han hecho aportes y contribuciones valiosas en la construcción de la nación colombiana.

Las primeras décadas del decimonónico fueron testigos de un escenario intercultural sin precedentes en la ciudad de Santafé de Bogotá, capital del Virreinato de la Nueva Granada, coexistían la sociedad blanca, representante e impulsadora de una cultura europea dominante, los indígenas con toda su riqueza nativa aunque en un acelerado proceso de aniquilamiento y los negros como invitados forzados a estos lares, portadores de la herencia africana; de igual manera, figuraban la población mulata y mestiza en un dinámico proceso de crecimiento.

La mayoría de estos grupos sociales se vincularon a los procesos independentistas, mucho antes que estos se exacerbaran, volviendo insostenible el injusto orden de dominación colonial instaurado por España en América. Es en este orden que debemos recordar a las nodrizas o amas de cría (casi todas mujeres esclavas negras), encargadas de atender durante los primeros años a los hijos de las prestantes familias santafereñas, se cree que fueron ellas quienes le enseñaron las primeras letras, creencias y la lucha por valores universales que ellas también reclamaban: Libertad, autonomía, independencia, derechos, etc.     

Las mujeres de la alta sociedad neogranadina, descendientes o entroncadas con la aristocracia española, forjaron una conciencia crítica proindependentista al conocer los ideales ilustrados que propugnaban por la libertad, igualdad y fraternidad en plena modernidad. Era esta la ocasión para incorporarse y escribir en letra de oro su rol en la historia de la patria, asumiendo posiciones de vanguardia, pero como era una sociedad patriarcal, estaban detrás de sus maridos y esposos. Es el caso de mujeres como Francisca Prieto Ricaurte, esposa de Camilo Torres Tenorio; Magdalena y Mercedes Ortega, esposa e hija del prócer Antonio Nariño; María Isasi, esposa de Jorge Tadeo Lozano; María Barahona de Caldas, esposa de Francisco José de Caldas; Josefa Baraya, esposa del militar Antonio Baraya.

A pesar de que ninguna de ellas aparece firmando el acta del 20 de julio de 1810, ni ninguna otra acta autonómica en la Nueva Granada, la gran mayoría estaba allí en la sombra, en cuerpo y alma apoyando de manera decisiva a sus esposos, de aquello no quedan discursos, pensamientos políticos estructurado o batallas memorables (les estaba prohibido ser parte de los ejércitos patrios), solo se valora la memoria de su heroísmo y su sacrificio como evidencias irrefutables de rol emancipatorio. Ellas auspiciaron las tertulias donde se preparaban las acciones revolucionarias que permitieron el grito de independencia, conformaron redes de espionajes por su cercanía a algún militar o autoridad española, actuaron como correos humanos, auxiliaron a los ejércitos rebeldes, etc.

También participaron de manera activa como convalidadoras de las juntas autonómicas que se formaron en América luego de la abdicación de Fernando VII en 1808, hicieron parte de los grupos en confrontación durante la llamada “patria boba”, se enrolaron en las luchas emancipatorias bolivarianas, entregaron hijos, joyas, dinero, armas, esclavos o apoyo logístico a los ejércitos libertadores (cocinaban, curaban heridos, preparaban armas, espiaban al enemigo, eran correos humanos, reclutaban hombres para la guerra, etc.); respondieron por sus hogares e hijos cuando sus maridos se vincularon a las actividades proindependentistas.

Dentro de estas valerosas mujeres encontramos:

Manuela Beltrán, socorrana, considerada la primera heroína de la independencia al arrancar el edicto de nuevos impuestos el 16 de marzo de 1781, Chispa con la que arrancó la insurrección de los comuneros.

Melchora Nieto y Francisca Guerra, comerciantes bogotanas. En los hechos del 20 de Julio de 1810 en Santafé de Bogotá apoyaron la junta de independencia y, posteriormente, la campaña Bolivariana, hechos por los cuales fueron deportadas de la ciudad al rumorarse que escondían armas, ropas y víveres para Bolívar.

Mercedes Abrego, cucuteña, artesana y costurera, confeccionó banderas y uniformes para los ejércitos de Bolívar. Fue precisamente al libertador a quien Abrego obsequió un bellísimo uniforme, por lo que fue ejecutada como subversiva el 13 de octubre de 1813.

Policarpa Salavarrieta, guadense, señalada de ser espía y conspiradora contra el imperio español, fue ejecutada con los ojos vendados y por la espalda en Santafé de Bogotá el 14 de noviembre de 1817. Es la heroína más recordada por los colombianos.

Dorotea Castro, palmireña, ejecutada junto a su esclava Josefa por auxiliar con hombres, caballos y armas a los patriotas.

María Josefa Lizarralde, zipaquireña, muerta allí en 1816 por sobornar a los guardias de la cárcel para que dejaran libres a soldados patriotas.

Antonia Santos, socorrana, colaboradora de las guerrillas patriotas, ejecutada el 28 de julio de 1819.

María Concepción Loperena, vallenata, hacendada que colaboró con 300 caballos y armamentos para la causa de Bolívar, firmante del acta de la independencia de Valledupar el 4 de febrero de 1813.

Ignacia Granados, samaria, “la mujer más valerosa de la costa”, a juicio del general José Prudencio Padilla, colaboradora de la causa libertaria y de Bolívar, ejecutada en la Plaza Central de Santa Marta (Parque de los Novios) el 9 de noviembre de 1817.

 

 

( 2 ) Comentarios

  1. ReplyGerman Silva Gersil

    20 DE JULIO….
    2000…1, 2..10…15 2018

    Patria Nuestra postrada en su letargo
    En ésta hora tormentosa de la historia
    Celebra pueblo nuestro su cumpleaños
    Revolcándose en dolor en hambre, guerra
    Están los buitres celebrando su victoria
    en orgía a la derecha de los bandos…

    Y el gendarme de macondo, sus gorilas
    besando allá en el norte otra bandera
    inclinando su rodilla y charreteras
    A la mafia terrorista, de Occidente
    dando parte de misión en tierra ajena
    traicionando, enterrando, gesta libertaria
    escriturando a los halcones Madre tierra…

    Galopan, masacran, ríen sobre osamentas
    inquisidores de turbas inconformes..
    salvajes adiestran águilas de muerte
    mercenarios arrasarán territorios, agua, vida
    vomitando veneno en hornos reciclado
    sobre la selva virgen, negras bestias
    camuflados en made in Usas uniformes
    castrando cerebros con chatarra inerte
    lluvia letal sobre orquídeas, rosas, aguacates
    Laboriosas abejitas en pubertad mujeres,
    ancianos en contorno y frutos en el vientre

    Esta mi patria postrada mas no muerta
    escuchad hienas malditas de la historia,
    masacrarás seres, jamás la primavera
    renacerá la patria preñada de valores..
    arrinconarán, no destruirán la resistencia
    Pacha Mama parirá hijos precoces,
    en el establo del milenio que ha abortado
    brotando multitud de héroes sin nombre
    en tropel insurrecto gritando independencia
    a liberar la patria grande mancillada
    Nueva Granada, Colombia Nueva
    Germinaran raíces milenarias
    Del corazón Indiano oh! Marquetalia,
    partisanos expandidos en tus montañas
    Germinará resistencia rediviva
    En rebeldía volverán las guerrilleras
    Resurgirán desde el Sur los insurgentes
    Juntando manos desde las Fronteras
    Irradiando puro amor en cordilleras,
    rugirán Andes renacerá la indiada
    Rescataran enseñas masacradas
    En brava Amazonía en la Patria Grande
    Bolivar, Fidel, Marulanda desatando encrucijadas!

    Germn Silva Gersil ____ Desde El Sur

    ….Pero .. Saldremos.

    Pero si armas tus huestes Norteamérica,
    Para destruir esa frontera pura
    Y llevar al matarife de Chicago
    A gobernar la música y el orden que amamos:
    Saldremos de las piedras y del aire para morderte.
    Saldremos de la última ventana para volcarte fuego.
    Saldremos de las olas más profundas
    para clavarte con espinas.
    Saldremos del surco para que la semilla golpee
    como un puño colombiano.
    Saldremos para negarte el pan y el agua.
    Saldremos para quemarte en el infierno.»

    Ludovicko Silva

  2. Profesor Gustavo usted no es cerio yo matándome para invitar está página y usted la dio ?? páseme su Wasap

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Gustavo Adolfo Carreño
Economista, Magister en Desarrollo y Cultura, Amante de la filosofía, librepensador caribeño, educador.