«Todos a tener sexo sin condón»

Opina - Sexualidad

2015-09-11

«Todos a tener sexo sin condón»

«Qué maravillosa noticia, todos a tener sexo sin condón», decía alguien en Facebook compartiendo el artículo sobre el hallazgo de la vacuna que podría curar el Sida. Y por el resto de comentarios, no parecía estar charlando al respecto.

¿Dónde está la educación sexual de este personaje?, ¿en los condones que regalan las niñas después de hacer una encuesta sobre salud sexual y reproductiva? ¿o en el tabú que manejan algunos padres e instituciones educativas para hablar de estos temas?

O también puede ser un seguidor del Bug chasing, aquella moda de contagiarse VIH voluntariamente que ha atraído tanto morbo como repudio desde hace un par de años; un fenómeno sin duda injustificable que incrementó de forma astronómica los índices de contagio, desarrollo de Sida y muerte.

Produce preocupación la ignorancia latente de tantas y tantas personas frente a los riesgos de sostener una vida sexual irresponsable.

Es que ni la pobreza es excusa válida para tener relaciones sexuales sin protección, ya que se consiguen preservativos a 200$ en los dispensadores que pululan en los locales comerciales, calles e incluso universidades del país. Si usted mismo, en su infinita ignorancia, no confía en su propio juicio o determinación, no asuma que puede confiarle su salud a una persona, que en últimas, puede irse tan tranquila de su vida dejándole el daño.

Obviamente todo esto aplica para mujeres contra mujeres, hombres contra hombres y mujeres contra hombres, dígase lesbianas, homosexuales, heterosexuales y demás, porque no es una problemática de género, sino de cama.

Yo admito que lo he hecho, pero no en una borrachera o en una escasez de condones, sino en una decisión «sabia» de pareja, tras exámenes médicos y compromiso, y pese a eso no me siento orgulloso ni pienso repetirlo, porque uno con la palabra compromiso puede insultar de muerte a alguien hoy en día.

Que se siente más rico, que es más calientico, que no se pierde tiempo, que no se embala uno porque se quedó sin preservativos a las 02:00 a.m., ¡¿Y qué?! ¿Muy grave si resuelven la calentura con otras técnicas y triquiñuelas que no comprometan la salud directamente? Báñese con agua fría, tómese un vasito de leche con miel y enrróllese en la cobija con una toalla a modo de cinturón de castidad. Y no se le ocurra reemplazar el condón por una bolsa de Carrefour, que no es chévere.

Las relaciones sexuales sin preservativo son algo complicado, sea con parejas esporádicas o estables, porque siempre va a ser mejor cuidarse que llorar y decir: «yo le creí», «yo sí le era fiel» o «es imposible, nosotros nos prometimos…» porque con eso el virus no va a salir del cuerpo.

Imagen cortesía de http://www.officialcollegelife.com/

El bareback, montada a pelo, irresponsabilidad, o como quiera que se le denomine, debe revaluarse. No ha sido fortuita la proliferación de virus y enfermedades de transmisión sexual, ni tantas campañas en vano que no educan sino que se resumen a entregar preservativos en los parques. ¿Qué hacer entonces para atacar esta problemática? Porque nos quedamos en la intención, que vale como idea pero sin resultados pierde sentido.

Deben ejecutarse estrategias que verdaderamente ataquen el problema y contribuyan a crear el habito de una sexualidad responsable, porque mientras el educador sexual del pueblo siga siendo el porno que se ve a escondidas, el cual es cada vez más morboso y extremo, las cosas irán de mal en peor.

( 8 ) Comentarios

  1. Esta clase de encabezados llamativos, sumados a la falta de interés de muchos por leer, es de uno modo u otro nocivo, ya me imagino a un montón de muchachitos diciendo que leyeron un encabezado de un articulo que recomiendan estas practicas de esa forma.
    A la final todo parece ir en degeneración, en especial esta juventud que parece desconocer las causas y efectos de sus actos, alaban a los mediocres, siguen artistas vacíos, no leen, no se interesan por cultivar el intelecto y el efecto a estos descuidos es lo que ahora vemos, esas niñitas que ahora les llaman madres solo porque no pudieron abortar a tiempo…
    Involución, solo eso es lo que nos depara.

  2. ReplyEduardo Posada Hurtado

    Buenas noches Ian. Me ha gustado tu artículo y para que quienes aún no lo han leído puedan disfrutarlo mas podrías corregir algunos errores que se te escaparon al editarlo. En el primer párrafo no me suena lo de «un alguien». En el sexto, creo que «chévere» tiene tilde en la primera e. Y en el penúltimo párrafo se te voló «intención» con s.

  3. Muy bien, comparto. Solo me resta decir: es triquiñuela, no triquilluela.

  4. Lo que pasa es que la información llega muy rápido a nuestros jóvenes pero la verdad la falta de análisis y precaución lleva a errores fatales no se si es más placentero o no lo que se trata es de responsabilidad siempre y es lo que debemos hacer todos actos responsables

  5. solo una pregunta con respecto al escrito, ¿ Que opciones, a parte de las que se realizan ahora, puedes recomendar? lo digo en la parte de educación, ya que segun tu el repartir los preservativos sirve para lo que sirve la apéndice, pero no pasamos de quejarnos y decir que eso no sirve.
    felicidades.

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Ían Schnaida
Campesino antioqueño | Periodista de la UdeA | Fundador y director de laorejaroja | Dudo de pa' fuera.