Hace algunos días un profesor me explicaba que tiene tres bases para votar por algún candidato y me las enunciaba: pasado en puestos públicos, partido político y debates.
Hasta hoy en Medellín algunas encuestas las lidera Alfredo Ramos, candidato por el Centro Democrático a la Alcaldía. Pero es necesario analizarlo desde estos tres diferentes enfoques: su pasado en puestos públicos nos muestra a un candidato que conocimos con su llegada al Congreso de la República, jalonado por la gran votación de la lista cerrada del partido de Álvaro Uribe.
Y, como su gran obra en el Senado en este mismo periodo, su famoso insulto a Claudia López y defensas de su padre en debates sobre parapolítica.
De su partido político, el Centro Democrático, podemos encontrar famosos casos de corrupción como: Óscar Iván Zuluaga con Odebrecht y la financiación de su campaña a la Presidencia, María Fernanda Cabal y la compra de votos (por lo cual la justicia no la ha tocado) y hasta su padre salpicado con parapolítica, de quien pidieron fuera condenado, en el 2018, a 9 años de prisión.
De sus debates para conocer sus ideas de ciudad, confrontadas con las de los otros candidatos, no podemos saber nada, ya que van dos en televisión regional y siempre tiene una excusa para no presentarse. También estuvo ausente en el debate organizado por La Oreja Roja.
Los habitantes de Medellín necesitamos tener más pensamiento crítico, no dar un voto a un candidato solo por pertenecer a un grupo político, o defender a un líder de honra dudosa. No más gente en el poder que gobierne por sus propios intereses y el mantenimiento de la hegemonía de alguien.
Candidatos, hablen de la deserción escolar, del desempleo gigante en Medellín, de la matanza sistemática y el horror de la corrupción en Hidroituango, no dejemos que nuestra ciudad de la flores, se convierta en un ramo de flores marchitas.
Foto cortesía de: El Espectador
Despierten paisas este señor tiene un historial de zangano.