¿Por qué la Alcaldía de Medellín contrató una empresa de eventos para dotación de tapabocas?

La COVID-19 ha alborotado ciertas dudas sobre la contratación pública de mercados y elementos de bioseguridad en el país.

Opina - Economía

2020-04-22

¿Por qué la Alcaldía de Medellín contrató una empresa de eventos para dotación de tapabocas?

Columnista:

Cristian Álvarez

 

La pandemia de la COVID-19 parece que no solo afecta la salud de los colombianos, ya que gracias a ella, viejos achaques que han atacado este país desde la colonia, parecen alebrestarse con la mortal enfermedad causada por el virus SARS-CoV2. 

Aparte de la parsimonia de nuestros altos gobernantes para tomar medidas efectivas, la COVID-19 ha alborotado ciertas dudas sobre la contratación pública de mercados y elementos de bioseguridad en el país. Pues bien, ahondando en esta problemática, una situación muy particular está sucediendo en Medellín.

 

Un curioso contrato

De acuerdo con la documentación oficial, la Alcaldía de Medellín celebró el pasado 30 de marzo (y hasta el 15 de abril) el contrato 4600085481 de 2020 bajo el Estatuto General de Contratación y la polémica figura de la Contratación Directa —cobijada por el Decreto 0375 de 2020 de Urgencia Manifiesta— para dotar de tapabocas certificados a los servidores públicos del municipio de Medellín.

El objetivo de dicho contrato es el de: “Suministro de implementos de autocuidado del COVID-19 en el Municipio de Medellín, TAPABOCAS GRUPO 1, para atender la calamidad pública y urgencia manifiesta declarada mediante Decreto Nro. 0375 del 17 de marzo de 2020”.

El valor del contrato es de $142 800 000 para la adquisición inicial de 200 000 tapabocas N95, es decir que cada tapabocas tendría un valor aproximado a los 714 pesos. Hasta acá no se aprecia nada raro. Sin embargo, es a partir de este momento donde la situación se pone bastante sospechosa.

Y digo esto porque la empresa encargada del suministro de esta cantidad de tapabocas —que vale la pena decir que escasean no solo en el país, sino en todo el mundo— es OLE Organización Logística De Eventos Colombia S.A.S.

Según su propio sitio web, “OLE es una OPC (Operadores Profesionales de Congresos) que proporciona soluciones para la participación en eventos; integramos todos los elementos técnicos y humanos para el cumplimiento de objetivos trazados por nuestros aliados estratégicos”.

Dentro de los servicios que provee dicha compañía está el de STAFF logístico para eventos, servicios de protocolo con “un amplio portafolio de modelos”, diseño y producción de stands, registro y acreditación, gestión de permisos para eventos, alquiler de elementos, catering y mercadeo.

En ninguna parte de su sitio web se lee que en sus 20 años de operación OLE tenga experiencia en adquisición y distribución de insumos médicos y de bioseguridad.

 

¿Por qué salió elegida OLE?

El lector pensaría que si bien bajo la figura de Calamidad Pública, la contratación directa permite que se contrate la oferta más económica posible. Sin embargo, este no es el caso del contrato entre la Alcaldía de Medellín y OLE.

Tal como se aprecia en la documentación, junto a OLE se presentaron otras dos empresas para suplir el pedido de tapabocas hecho por la Alcaldía.

El 5 de marzo, la primera oferente que envió su propuesta fue Soluciones Empresariales Ocupacionales S.A.S. —empresa oriunda del municipio de Buga, Valle del Cauca— la cual pidió por 2 millones de “Tapabocas respirador quirúrgico de 3 capas con filtro” la suma de 1820 millones de pesos, es decir, a $910 pesos cada tapabocas. Esta empresa fue descartada del contrato posiblemente por su alto costo.

El 19 de marzo se registra la propuesta de la segunda oferente que es —vaya casualidad— la empresa AN Producciones, “una empresa nueva en el mercado de la planificación logística y técnica de eventos, activaciones de marca y producciones audiovisuales”. Su oferta, por 80 000 tapabocas fue de $121 191 504, es decir, cada tapabocas tendría un valor de $1514 pesos.

Finalmente, el 20 de marzo OLE envió su propuesta. Pero ojo a esto: OLE propuso cobrar por los mismos 80 000 tapabocas y el transporte de dichos elementos $142 978 500 pesos, o sea, $21 786 996 pesos más que AN Producciones.

¿Por qué entonces una empresa que aparte de no ser idónea para dicha tarea y que encima cobra más dinero por un servicio, termina siendo la beneficiada con el contrato? La respuesta la podría estar dando la propia OLE.

En su Formato De La Carta De Presentación De La Oferta para el Proceso de Contratación, el representante legal de OLE admite que se enteró del contrato de los tapabocas a través de “una llamada realizada por el Municipio de Medellín”.

Si bien esto no tiene nada de malo, sí causa mucha curiosidad que una empresa que pertenece al ramo de la organización de eventos sea llamada para suplir una necesidad de material biomédico y/o de bioprotección.

Además, una pista a mi juicio importante sobre esta llamada, es una nota que anexa OLE en su cotización. La nota es dirigida al coordinador de la Alcaldía de Medellín Ricardo Giraldo y allí se lee lo siguiente:

Doctor Ricardo Giraldo. Reciba de antemano nuestro saludo de agradecimiento por haber pensado en los servicios de nuestra compañía para la puesta en marcha de esta importante estrategia para la ciudad. Estamos seguros de poder ofrecer la confianza, seguridad y precio que está buscando”.

Y a partir de acá surgen muchas preguntas:

¿Quién es Ricardo Giraldo? ¿Fue él quien contactó a OLE? De ser así, y aunque no está incurriendo en ninguna falta disciplinaria por ello ¿Por qué recomendaría una empresa que NO es apta para cumplir el objetivo de la Alcaldía? ¿Qué relación tiene Giraldo con OLE? ¿Cuál es su nivel de influencia en las contrataciones de la Alcaldía? ¿De dónde va a sacar una empresa de organización de eventos un insumo que ni las mismas entidades médicas han podido conseguir?

 

Respuestas extraoficiales de la Alcaldía

De manera extraoficial, un funcionario de la Alcaldía de Medellín nos respondió algunos de los interrogantes.

El servidor comentó que el Equipo de Categorizadores de la Alcaldía es el encargado de recibir todas las propuestas de contratación relacionadas con el tema de coronavirus. Según él, la invitación a cotizar sus servicios se hacía a través de un texto en un correo electrónico, donde a los interesados se les pedía enviar su cotización.

Es decir, el señor Giraldo es un contratista que pedía las cotizaciones. Y había más personas haciendo esa tarea, otras (cotizaciones) llegan a nombre de otro y otro, comentó el servidor público.

Respecto al número de tapabocas, la fuente señaló que no son 200 000, sino 80 000 tapabocas que ya fueron entregados a diferentes dependencias de la Alcaldía. El fallo en la minuta posiblemente se dio a un error tipográfico. Eso sí, tampoco conocemos la minuta corregida, pues tras una semana de esperar respuesta, nunca llegó.

Preguntado por la elección de una empresa que nada tiene que ver con el ramo de la bioseguridad —y buscando capotear la falta de idoneidad de OLE— el funcionario señaló que los parámetros de elección, no solo se fijan del valor del contrato, sino también en el tiempo de entrega.

Muchos venden tapabocas a menor precio, pero llegan dentro de un mes. Es decir, para la contingencia no nos sirven. Me dicen que quizá el contratista OLE ya tenía los tapabocas guardados y listos para distribuir.

¿Y usted, amable lector, queda satisfecho con dichas respuestas o también se pregunta de dónde sacó una empresa de eventos tal cantidad de tapabocas, cuando ni siquiera el sector salud los logra conseguir a tiempo?, ¿acaso tenían guardados los tapabocas?, y de ser así, ¿por qué?, ¿previsión?, ¿acaparamiento? No hay forma de saberlo, pues no hay nota alguna en el contrato del encargado de la supervisión del mismo.

 

( 3 ) Comentarios

  1. seguimos pues sin saber por qué se eligió esa empresa para contratar, no parece haber sobrecostos en el valor de los tapabocas

  2. En estos momentos la crisis es tan complicada que los que teníamos empresas dedicadas a otras actividades económicas estamos vendiendo Elementos de protección para el Covid y como dice el articulo muchas ofrecen pero hasta hora están tratando de traer las importaciones y las entidades las necesitan para ya, muchos de estos elementos no se fabrican aquí en Colombia y las existencias que habían ya se agotaron. La verdad me parece que los argumentos de la alcaldía son válidos pues lo que tratamos de conseguir estos insumos sabemos que es casi imposible conseguir grandes cantidades y en tiempos cortos o inmediatos.

  3. Todos los corruptos están haciendo su agosto ante la ausencia de control a la contratación, ya que ante la perspectiva de un evento grave, la gente acepta lo que sea, hasta actos corruptos.

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Álvarez Cristian
Periodista de la Universidad de Antioquia. ¿Quis custodiet ipsos custodes?