Las reformas del Gobierno: vender la casa para pagar arriendo

Se ven dos reformas muy cerca: una fiscal y una tributaria y la reactivación económica pos-COVID-19 (aunque no se descarta una reforma laboral que el partido de Gobierno lleva buscando hace tiempo) un ejemplo claro de esta sería el decreto 1174.

Opina - Economía

2020-09-03

Las reformas del Gobierno: vender la casa para pagar arriendo

Columnista:

David Zapata Lozano

 

El pasado miércoles, 29 de julio, se radicó en el Congreso el proyecto para el presupuesto correspondiente al tercer año de mandato de Iván Duque Márquez, presidente de la Nación, este presupuesto es especial ya se puede ver la ruta que el Gobierno va a tomar para recuperar la economía de esta gran crisis debido a la pandemia.

Este presupuesto, para el 2021 tiene un total de 314 billones de pesos, comparándolo con el que rige el año actual, ajustado con la inflación es de 282 billones de pesos, es decir, se aumentó en unos 32 billones de pesos o lo equivalente a un 10.19 % con respecto al de este año, como era de preverse por la coyuntura económica.

Según el ministro de Hacienda este presupuesto tiene como objetivo principal reactivar el empleo debido al creciente desempleo que en junio se ubicó en el 19.8 % o alrededor de 4.5 millones de personas (datos tomados del DANE), pero al entrar a observar el presupuesto con más detenimiento vemos cosas no muy favorables.

Hay un faltante de 38.1 billones de pesos los que serán cubiertos de la siguiente forma:

  • Alrededor de 12 billones serán cubiertos con ventas de activos del Estado, el proyecto no refleja cuáles son, pero este Gobierno se ha visto dispuesto vender parte de Ecopetrol, la totalidad o la mayor parte de ISA o Cenit, o alguna empresa que conforma el Grupo Bicentenario (Holding Financiero de Colombia).
  • Y el faltante de 26.1 billones de pesos no es claro de dónde saldrá, ya que en este proyecto se indica el rubro de otros recursos de capital. ¿Cuáles? No lo sabemos, puede ser créditos externos o internos, rendimientos financieros, entre otros. El caso es que el proyecto no detalla cuáles puedan ser.

Este presupuesto tiene como principales cambios con concerniente para el de este año lo siguiente:

  • El presupuesto para la defensa se ubica en 26.8 billones creciendo alrededor entre un 10 a 14 puntos porcentuales con respecto al de este año dejando en evidencia la importancia de la guerra para este Gobierno.
  • Mientras los recursos de la guerra aumentan vemos como para el campo colombiano el agro un sector fundamental su presupuesto baja alrededor de un 6 % dejando solo 1.7 billones para este sector de principal importancia.

  • Los sectores de educación y salud son los que más dinero se llevaran para este proyecto algo muy importante juntos se llevan alrededor del 27 % del total del presupuesto nacional, esperamos que esto sea invertido en lo que se necesita y no se desaparezca en el país del realismo mágico.
  • El ministerio del trabajo tendrá un recorte y solo se le destinaran 27.02 billones de pesos.
  • Algo de suma importancia el que se proyecta el recaudo tributario de 152 billones de pesos que es absurdo si se observa que lo proyectado para este año era 146 billones de pesos (antes de la pandemia), dejando de lado la actualidad económica nacional. Es probable que el recaudo para el siguiente año sea inferior al presupuestado, al igual que el de este año.

Según lo dicho por el ministro Carrasquilla este presupuesto será el principal motor para la reactivación económica, podemos ver otra «jugadita» de este Gobierno la cual consistió en entregar este presupuesto en un formato de PDF como lo denunció el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana lo que hace imposible un análisis estadístico en algún programa existente.

De igual modo, se observa que el Gobierno no gastará 12.3 billones este año, sino los destinará como mecanismo de balance. Esos 12.3 billones pueden servir de ayudas en lo faltante del año para la población más afectada por la pandemia, pero el Gobierno ya descartó esta posibilidad.

De este proyecto se pueden concluir varias cosas:

Si se llegan a vender los activos estatales que se presumen puede llegar a suceder, esto será como vender la casa para pagar arriendo, ya que los ingresos que den estas ventas solo serían utilizados en el año y los siguientes años quedaríamos de manos cruzadas o con un mayor faltante.

La reactivación del mercado laboral no será acompañada por el Gobierno, sino se dejará al sector privado, que será incapaz de hacer esto si no va acompañado del Gobierno, lo vimos con la sonada Reforma Tributaria, cuyo objetivo era la creación de empleo y aumento de la inversión a cambio de rebajas en la tributación y esto no se dio.

Además, este proyecto plantea una recuperación en V de la economía nacional; un escenario muy positivo y que en lo personal no veo muy probable. Una recuperación en U sería más probable y descuadraría mucho las cuentas del Gobierno. Algo similar a lo que pasó con el precio promedio del petróleo, el cual ha sido muy por debajo de lo proyectado. 

Por último, se ven dos reformas muy cerca: una fiscal y una tributaria, aunque no se descarta una reforma laboral que el partido de Gobierno lleva buscando desde hace tiempo y la reactivación económica pos-COVID-19 sería la excusa perfecta para realizarla, esto lo muestra el decreto 1175 del 27 de agosto que se analizará en otro espacio.

 

 

( 1 ) Comentario

  1. Upa que buen articulo

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David Zapata Lozano
“No todos los economistas vestimos de corbata y pensamos como banqueros”.