La música como concepto artístico, no comercial

Según un estudio de la Cámara de Comercio de Bogotá, 20 millones de colombianos no asisten a conciertos, y menos del 50% de la población escucha música todos los días de la semana.

Opina - Cultura

2019-08-24

La música como concepto artístico, no comercial

Autor: Andrés Benouit Lourido

“Aprende las reglas como un profesional para poder romperlas como un artista”.
Picasso.

 

De las bellas artes, la música es la más abstracta; hay que sentirla, no entenderla. Sin embargo, la apreciación que se le da hoy en día no es digna de merecer, porque la industria en su afán de ventas de sonidos, arrebató su validez simbólica, y como públicos consumidores, nos acostumbramos a digerir música fácil con círculos armónicos repetitivos y a veces, dudosamente considerada arte.

Estamos en una convergencia digital por el desarrollo de las nuevas tecnologías de comunicación, por lo que consumir música hoy, se hace con una interacción más cercana y sencilla a través de los múltiples dispositivos electrónicos. No solo cambió el mercado de ventas, técnicas de grabación y soportes de almacenamiento, sino que, evidentemente, modificó la experiencia e interactividad de los consumidores.

El consumo cultural en su sentido simbólico de apreciar la música pasó de una apropiación del producto (vinilo, casete o CD), a suscripción streaming pagando (o acudiendo a servicios gratis) una experiencia digitalizada de escuchar música.

El panorama actual de las disqueras clásicas es estar detrás de los servicios de streaming como: Spotify, Amazon Music, Apple Music, Deezer, Google Play Music, YouTube Music, entre otras. Estas plataformas son ecosistemas que ofrece amplios contenidos exclusivos premium, o también versiones gratuitas bajo condiciones, con calidad de sonido, e interactividad respecto a las creaciones de los artistas.

Teniendo en cuenta dicha forma globalizada de cómo funciona la industria hoy y del futuro, ¿está encasillada la música a venderse sin trascendencia artística?

Las estadísticas sobre diversidad de géneros musicales, calculó que el sonido bailable como el reguetón está en el porcentaje preferencial de los colombianos, por encima del 50%, mientras que otros géneros como el blues, jazz, soul, rock, indie, y derivados, está por debajo del 20% de predilección.

Aclaro estos datos sin ánimo de demeritar un género u otro, porque entiendo que así funciona la industria, y esta produce lo que el mundo pide. Las canciones más sonadas en las plataformas digitales son de reguetón y particularmente en Colombia somos un país rumbero, el beat y ritmos sincopados de dicho género, están en la preferencia del consumo como lo dice la estadística. Sin embargo, tengo la intención de resaltar la riqueza de otras propuestas sonoras que exigen una creación más orgánica y rompen estructuras rítmicas y líricas.

Por ejemplo, la música independiente es característica de una vocación puramente artística y no comercial. Justamente este atributo en el arte, favorece las propuestas sonoras con contenidos más profundos; sin límites para crear productos con plena libertad.

Según un estudio de la Cámara de Comercio de Bogotá, 20 millones de colombianos no asisten a conciertos, y menos del 50% de la población escucha música todos los días de la semana.

La música como concepto artístico, la debemos apoyar yendo a conciertos, a festivales, valorarla desde otras perspectivas, apoyar el arte creado con honestidad y esforzarnos en darle visibilidad en espacios en donde la cultura sea protagonista.

Todos tenemos acceso de relacionarnos e interactuar musicalmente sin ninguna restricción. Ya no es privilegio y exclusividad de pocos «cultos» como lo fue en un inicio de la historia de la música.

Colombia cuenta con miles de espacios gratuitos, entre ellos, uno próximo será el Concierto Radiónica 2019 (de la emisora pública de RTVC) el 7 de septiembre en Bogotá; cada año conectan artistas y musicómanos impulsando un intercambio regional.

1280 Almas, Aerophon, Mabiland, Burning Caravan, Odio a Botero, Moügli, Vetusta Morla de España, Baroness de Estados Unidos y Él mató a un policía motorizado de Argentina, expondrán un show recargado de surrealismo sonoro. En palabras de Álvaro González Villamarín, “El Profe”, director de la emisora, significa:

“La construcción de puentes sonoros entre Colombia y mundo para poder proyectar las nuevas propuestas sonoras de nuestro país, por otra parte, este escenario le permite a nuestros artistas crear nuevos vínculos con el exigente y dinámico mercado musical y les ofrece una profunda reflexión sobre sus propuestas y estéticas”.

Démonos la oportunidad de disfrutar diferente la música y sentirnos libres con ella.

 

 

Foto cortesía de: El Espectador

 

 

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Andrés F. Benoit Lourido
Comunicador Social y Periodista. Colaborador de prensa escrita en medios digitales independientes. Trabajo en comunicaciones digitales del periódico El Tiempo. Amante de la cultura y el arte.