La ciencia de la literatura

Madame tenía constantes pensamientos de escaparse con su nuevo amante y dejar de lado su vida monótona en Yonville. Sin embargo, se lleva una gran decepción cuando este la deja plantada el día en que iban a ejecutar el plan de escape.

Opina - Relaciones

2019-08-28

La ciencia de la literatura

Autora: Dannia Viviany Forero Alarcón

 

Emma Bovary, la joven ambiciosa por conocer el mundo. Ella era una simple mujer en épocas donde serlo “cerraba puertas, condenaba a opciones más mediocres que las del hombre”, Vargas Llosa. La mujer que en su vida amó a 3 hombres y que poco a poco fue perdiendo el encanto por su esposo con quien contrajo matrimonio muy joven. La que le quitó el sentido a su maternidad tras dar a luz a una niña.

Los comportamientos de este personaje, que hicieron parte de un escándalo en 1857 tras la publicación realizada de la obra Madame Bovary escrita por Gustave Flaubert en 1856, se deben a las variaciones en los niveles de diferentes hormonas que influyeron en su manera de pensar y actuar.

Inicialmente el libro nos presenta a Emma, quien se dedica, en un entorno rural, a coser y colaborarle a su padre en los quehaceres del hogar, es una joven que empieza a sentir una pequeña atracción por el médico de la zona, Charles, ya que realiza constantes visitas de oficio para la supervisión de la evolución en la fractura de su padre.

Luego de varias semanas de visita y cortas conversaciones con Emma, Charles decide pedirle matrimonio y ella acepta. Su entorno en la nueva casa pasa a ser de una clase social más acomodada, allí empieza a llenarse de lujos y de inconformidades por su aburrido matrimonio que la lleva a enfermarse.

A partir de eso, Emma, quien ya se encontraba en estado de gestación, se traslada junto a su esposo a Yonville donde conoce a León Dupuis, un practicante de notario con quien tiene muchos temas en común que la lleva a entablar una relación de amistad, luego de amor y por último de desamor cuando él decide salir de Yonville para continuar sus estudios y dejar de lado a esa mujer que él consideraba “inalcanzable”.

El último amor de su vida fue Rodolfo un hombre rico que sedujo a Madame Bovary desencadenando el adulterio tras varios encuentros a escondidas de su esposo.

Madame tenía constantes pensamientos de escaparse con su nuevo amante y dejar de lado su vida monótona en Yonville. Sin embargo, se lleva una gran decepción cuando este la deja plantada el día en que iban a ejecutar el plan de escape.

Por último, un personaje secundario, pero no menos importante, fue Berta, la hija de Emma, quien fue criada por una nodriza y no por su propia madre ya que

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Dopamina y norepinefrina: dos compuestos orgánicos derivados de los aminoácidos que en el enamoramiento, o amor romántico, tienen un mayor nivel en el organismo, lo cual produce una mayor concentración, pasando por alto los defectos de su amante y generando una perseverancia cuando la relación se encuentra amenazada.

Sin embargo, pude notar que en la obra, Emma perdió el interés por su esposo a causa de que su matrimonio no fue producto de un amor profundo sino de un conjunto de interacciones mínimas que le dieron una idea vaga de lo que podría ser vivir con él, sin dejar de lado las fantasías literarias de cada uno de los libros que leyó en el internado.

Por esto, los niveles de estas dos hormonas fueron disminuyendo a causa de la pérdida de actividad en la corteza cerebral por el interés perdido en esta pareja, que no fue lo que ella esperaba, a diferencia de su interacción con León, con quien su relación era cariñosa y llena de coqueteo disimulado por parte de ambos, ya que la dopamina generada se había distribuido a lo largo de las zonas cerebrales por acción del área ventral tegmental que produjo una atención concentrada e intensa, resultado del enamoramiento y de la evolución tras la búsqueda de una pareja que genere confianza.

Por otro lado, la serotonina tiene unos niveles inversamente proporcionales a las hormonas anteriores, donde al aumentar las unas, disminuyen las otras. Su función se encuentra en la fortaleza de mantener una relación estable dando un aumento en el impulso sexual y la capacidad de enamorarse.

Con Charles los niveles aumentaron, por lo cual se generó una insensibilidad ante las emociones que conllevó a que su relación dejara de ser estable. Por lo tanto, la reducción de actividad en la corteza cerebral le produjo sentimientos de duda ante su matrimonio.

 

 

 

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Dannia Viviany Forero Alarcón
Estudiante de último año de bachillerato, con preferencia por obras literarias clásicas e interés por las ciencias naturales y humanas.